Reconocer la labor y el compromiso de las maestras es un gesto que solemos hacer poco como gremio y también como sociedad. Deberíamos aprender a hacerlo. Por lo tanto, aprovechando el momento en que una profesional de la educación como Mercedes Blasi deja su vida laboral activa, escribimos estas líneas también para explicar la historia de su relación con la A. M. Rosa Sensat, que se remonta a la década de 1980, cuando, desde la revista Infància se empezaron a organizar los primeros viajes pedagógicos. Mercedes, pedagoga de Granada, era una de las personas fieles que se apuntaban a esta iniciativa, que era algo más que un viaje: era una excusa para propiciar el contacto entre maestras y experiencias educativas, en Cataluña, en el resto de los pueblos del Estado, e incluso más allá de las fronteras.
En uno de esos viajes, en el año 1985, se empezó a hablar de una idea que acabaría siendo una realidad: hacer una revista en lengua castellana, escrita por y dirigida a maestras y maestros de los territorios del Estado donde no se habla en lengua catalana. Así, en 1990 nace Infancia, con un comité asesor formado por Irene Balaguer, Roser Gómez, Tere Majem, Rosa M. Securun, Pepa Òdena y Roser Ros, pero con un consejo de redacción formado por maestras y profesionales de la educación de todo el Estado español.
La revista se presenta aquel mismo año precisamente en Granada, donde, desde el Patronato Municipal de las escuelas infantiles del que Mercedes formaba parte, organizaron una fiesta inolvidable. A raíz de este vínculo con Granada y con Mercedes, ella acabará entrando en la revista como codirectora en el año 2003, y lo será hasta el año 2011. Otras maestras de todo el territorio han ido siguiendo el recorrido de la revista.
Sabemos que Mercedes es una mujer discreta y que cree mucho más en el trabajo de equipo que en el de las individualidades, y ello ha dejado, ahí donde ella ha trabajado –desde el Patronato de Granada a la Fundación Granada Educa, pasando por la revista Infancia–, un poso de rigor y de compromiso en la defensa de la educación de calidad y, sobre todo, en la defensa de la unidad del 0-6. Las escuelas de Granada que ella impulsó son uno de los pocos baluartes que nos quedan hoy para poder ver y vivir un 0-6 de calidad.
A menudo, los proyectos tienen detrás nombres y apellidos, y por ello nos parece importante dar a conocer la bonita historia de esta amistad que nació gracias a los viajes y que continúa hoy en forma de revista.
¡Gracias por todo lo que nos has enseñado, Mercedes Blasi!
